Aqui teneis su leyenda:
“Hace 2.500 o 2.400 años, ya nadie lo recuerda bien y la verdad es que no lo importa, un ermitaño de muy mal carácter y pocas pulgas vivía aislado en la montaña. Un día, como cualquier otro, salió a ver el cielo, pasatiempo en el cual invertía gran cantidad de tiempo junto al de realizar quejas que ya ni siquiera él mismo recordaba por qué las hacía.
Mientras se encontraba quejándose de las nubes su camino se cruzó con el de Buda, el cual se encontraba retornando del Nats. Al ver al ermitaño, Buda decidió alegrarlo dándole una una reliquia como ofrenda, ni más ni menos que un cabello de Gotama.
El anciano, temeroso a que esta fuese robada, decidió ubicar el cabello bajo una gran roca en el borde de la montaña. Con el fin de permanecer constantemente cuidando la reliquia construyó una pagoda. La construcción, tras varios años, fue terminada y a la vez dotada con la consigna de que si el cabello de Gotama alguna vez era sustraído de la base de la roca, tanto esta como el templo caerían al vacio.”
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